Los problemas sociales son uno de los síntomas más comunes en todos los tipos de TEA. Las personas con TEA no solo tienen “dificultades” sociales como la timidez. Los problemas sociales que tienen causan serios problemas en la vida cotidiana.
Ejemplos de problemas sociales relacionados con el TEA:
– No responder al nombre antes de los 12 meses de edad.
– Evitar el contacto visual.
– Preferir jugar solo.
– No compartir intereses con otros.
– Solo interactuar para lograr un objetivo deseado.
– Tener expresiones faciales planas o inapropiadas.
– No entender los límites del espacio personal.
– Evitar o resistir el contacto físico.
– No ser consolado por otros durante el malestar.
– Tener dificultades para entender los sentimientos de los demás o para hablar sobre los propios.
Típicamente, los bebes están muy interesados en el mundo y las personas que los rodean. Para el primer cumpleaños, un niño típico interactúa con otros mirándolos a los ojos, imitando palabras y acciones, y usando gestos simples como aplaudir y decir “adiós” con la mano.
Los niños típicamente muestran interés en juegos sociales como esconderse y el juego de las palmas. Pero a un niño pequeño con TEA podría costarle mucho aprender a interactuar con otras personas.
Algunas personas con TEA pueden no estar interesadas en otras personas en absoluto. Otros podrían querer amigos, pero no entender cómo desarrollar amistades. Muchos niños con TEA tienen mucha dificultad para aprender a turnarse y compartir, mucho más que otros niños. Esto puede hacer que otros niños no quieran jugar con ellos.
Las personas con TEA podrían tener problemas para mostrar o hablar sobre sus sentimientos. También podrían tener dificultades para entender los sentimientos de los demás. Muchas personas con TEA son muy sensibles al tacto y podrían no querer ser abrazadas o acurrucadas. Los comportamientos auto estimulantes (por ejemplo, mover los brazos repetidamente) son comunes entre las personas con TEA. La ansiedad y la depresión también afectan a algunas personas con TEA. Todos estos síntomas pueden hacer que otros problemas sociales sean aún más difíciles de manejar.